~English below~
Alquiler, antiracismo y transnacionalismo son incompatibles: ¡contra subsidios para los arrendadores explotadores!
Mientras que vemos cómo se despliegan varios fondos para ayudar a los recién llegados (solicitantes de asilo, migrantes, etc.), estamos viendo una repetición de lo que desató la pandemia: más y más subsidios para las clases arrendadoras sin ningún beneficio significativo para les desposeídes. De hecho, cuanto más se subvenciona a les arrendadores, más débil es el poder de los desposeídos y nuestra capacidad de ser libres.
Si los arrendadores desean manifestar tu solidaridad con los recién llegados o a cualquier persona necesitada, nunca se les debe cobrar el alquiler si la persona necesitada no está en el proceso de ser agregada como co-propietaria de la propiedad o del terreno.
Condenamos esta práctica mediante la cual se utilizan fondos, subvenciones, etc. para subsidiar relaciones coloniales y explotadoras. No condenamos a les inquilines obligades a hacerlo; condenamos a les arrendadores que lo exigen y lo aceptan y a los que permiten que esto suceda, especialmente cuando tenemos un/a amigo/a, familiar o colaborador que está involucrado/a en este fraude principal.
No respaldamos ningún tipo de arrendador explotador que cobre alquiler–y no solo cuando se trata de ayudar a personas nuevas en estas tierras. Esto se aplica a todos.
Mucha gente olvida o no sabe que la escasez de seguridad en tierra y vivienda para los oprimidos se debe en gran medida a las clases arrendadoras (respaldadas por varios poderes estatales, incluidos los gobiernos progresistas) de hoy y de ayer. Ellos son el motivo porque sentimos que haya tan poco y porque tenemos acceso a tan poco. Con poco o ninguno empujón hacia atrás y por nombrar sólo algunos de sus delitos, tanto legales como ilegales: los arrendadores de Chicago e Illinois se confabulan para subir los precios de los alquileres; derrumban edificios porque no los cuidan; toman represalias y expulsan de facto de la ciudad a los inquilinos que se atreven a hacer frente a su brutalidad; exprimen cada centavo de los inquilinos y de los pueblos indígenas sin perspectivas de seguridad real a largo plazo como los explotados hacen posible para las clases arrendadoras. Es por estas razones que existen tantas campañas políticas recientes para la protección de los inquilinos en la tierra de Chicago y más allá: por ejemplo, el control de alquileres, la campaña de reparación de la MTO, desalojos por causas justas, etc. Aunque las verdaderas soluciones se encontrarán en reuniones y asambleas de los oprimidos– no en aquellos ámbitos legislativos que los arrendadores manipulan a su favor….
Si una persona arrendadora quiere recibir una excepción para–por ejemplo, las utilidades (gas, agua, etc.) que una persona inquilina realmente consume o alguna otra cosa, esto tiene que ser regulado por asambleas de les desposeídes dentro de soluciones cooperativas que se opongan a todas las formas de opresión y colonialismo, incluido el colonialismo que aún la gente de color practica.
Necesitamos encontrar formas creativas en las que esos fondos puedan usarse para ofrecer para todos la seguridad de largo plaza y cooperativa en la vivienda y en los terrenos.
Hagamos agitación en nuestras relaciones, viejas y nuevas, para pensar diferente y rechazar las formas en que los gobiernos y arrendadores están fabricando crisis para enfrentarnos unes a otres y fortalecer de muchas maneras el poder de las diversas clases de depredadores que gobiernan por encima de nosotres y que también encontramos entre los llamados ayudantes mutuos, progresistas, activistas, liberales y radicales. Haz el tabú de preguntarles a tus amigues y coorganizadores: ¿eres arrendador? ¿Proteges alguno?
Un grupo de dos personas que agitan tales ideas y prácticas en espacios puede ser la semilla de algo poderoso. No necesita consultarnos ni unirse a una organización existente para ser una fuerza efectiva o tener un comienzo significativo para desafiar la explotación que ves donde estás activo. Ojalá podamos conectarnos a lo largo del camino, pero a veces la conectividad inmediata no es posible.
Si eres arrendador y deseas manifestar tu solidaridad con las personas necesitadas en el espíritu de este escrito, comunícate con tenantsunited.hpwl [arroba] gmail [punto] com. Quedas advertido: no seremos utilizados para justificar acuerdos turbios; ni siquiera lo intentes. Además, nuestra capacidad es muy limitada, pero haremos lo poco que podamos para alimentar tendencias igualitarias voluntarias sin perder de vista nuestros otros frentes de acción.
Por un futuro cooperativo,
La mayor parte de esta declaración fue presentada originalmente a Tenants United [Inquilinxs Unidxs] por tres vecinos cafes e indígenos para quienes este tipo de solidaridad con los refugiados, solicitantes de asilo, migrantes, etc. ha sido una parte integral de sus vidas. Han aprobado esta versión final que Tenants United (en el sur de Chicago) también ha aprobado el 28/09/23.
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Rent, Anti-Racism and Transnationalism Are Incompatible: No Subsidies for Exploiter Landlords!
As we see various funds rolling out to assist new arrivals (asylum seekers, migrants, etc.) we are seeing a replay of what the pandemic unleashed: more and more subsidies for the landlord classes without any meaningful gains for the dispossessed. In fact, the more landlords are subsidized, the weaker is the power of the dispossessed and our ability to be free.
If landlords wish to provide “solidarity” to new arrivals or anyone in need, rent should never be charged to them if they are not in the process of being added as co-owners of the property and, or land.
We condemn this practice whereby funds, grants, etc. are being used to subsidize colonial, exploitative relationships. We do not condemn those tenants forced to use them—we condemn landlords who are demanding them and accepting them and those who are allowing this to happen, especially where we have a friend, relative or collaborator who is involved in this mainstream racket.
We do not endorse any type of exploiter landlord charging rent—and not just when it comes to helping people new to these lands. This applies to everyone.
Many people either forget or do not know that the scarcity of security in land and housing for the downtrodden is largely due to the landlord classes (backed by various state powers, including the progressive governments) of today and yesterday. They are why we feel there is so little and why we have access to so little. With little to no pushback, and to name just a few of their crimes, both legal and illegal: landlords in Chicagoland and Illinois collude to drive up rent prices; they run buildings into the ground; they retaliate and de facto expel from the city tenants who dare to stand up to their brutality; they squeeze every penny from tenants and Indigenous people with no prospects of real long-term security for tenants as landlords have for the rent tenants put forward. It is for these reasons so many recent policy campaigns for tenant protections exist in Chicagoland and beyond–for example, rent control, MTO’s repair campaign, just cause evictions, etc. Though the real solutions will be found in meetings and assemblies of the oppressed–not in those legislative domains that the landlords have rigged in their favor….
If any landlord wants to receive an exception for, say, utilities for what a tenant actually consumes or some other thing, this should be regulated by assemblies of the dispossessed within cooperative solutions that stand opposed to all forms of oppression and colonialism, including the colonialism that even people of color practice.
We need to find creative ways in which such funds can be used to offer long-term and cooperative housing and land security for everyone.
Let’s agitate in our relationships, old and new, to think differently and refuse the ways in which governments are manufacturing crises to pit us against each other and to reify in many ways the power of the various predator classes that rule above us and that we even find among so-called mutual aidists, progressives, activists, liberals and radicals. Do the taboo thing of asking your friends and co-organizers: are you a landlord? Do you protect any?
A group of two people agitating such ideas and practices in spaces can be the seed of something powerful. You don’t need to consult us or join an existing organization to be an effective force or have a meaningful start to challenge the exploitation you are seeing where you are active. Hopefully we can connect along the way but sometimes immediate connectivity is not possible.
If you are a landlord and wish to provide solidarity to people in need in the spirit of this letter, reach out to tenantsunited.hpwl@gmail.com. Be warned: we will not be used to justify shady arrangements; don’t even try it. Furthermore, our capacity is very limited, but we will do what little we can to nourish voluntary egalitarian tendencies while not losing focus on our other fronts of action.
For a Cooperative Future,
Most of this statement was originally brought forward to Tenants United by three Brown and Indigenous neighbors for whom this type of solidarity to refugees, asylum seekers, migrants, etc. has been an integral part of their life. They’ve approved this final version that Tenants United (in south Chicago) has also approved on 09/28/23.